martes, 7 de febrero de 2012

DEMASIADAS PREGUNTAS

¡Hombre, que tiempo sin venir por aquí! ¿Qué tal?
¡Ya ves!
Cuando puedas me pones un café con leche. (Me parece que he estado un poco brusco... y se ha dado cuenta).

Tengo ganas de estar en silencio. Este folleto, aunque lo publica un banco, me parece bueno para echar un rato.

Conversaciones sobre el futuro”. Precisamente hoy que lo veo más oscuro que nunca. Parece irónico, o cuando menos extraño, que para un rato de reflexión (hablar conmigo mismo) utilice conversaciones de otras personas.

Vuelvo a leer el prólogo: “Vivimos tiempos inciertos: demasiadas preguntas para tan pocas respuestas”.

Estoy cansado, todo el día intentando encontrar una explicación. El presente, bastante jodido. El futuro, realmente complicado.

Lo siento, no tengo ganas de hablar. Ni de pensar. Me gustaría estar en lo alto de una montaña. Y gritar. No decir nada, pero gritar. Y sin embargo, estoy sentado en este sillón giratorio, sin saber que hacer….

No es mala idea oír un poco de música. Algo con lo que me identifique en este momento. Solo música. Sin letra. ¡Joder, que nadie me hable!

Un poco de blues no estaría mal. Tras varios intentos con el buscador, ahí está James Cotton…


…. sí, más tranquilo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario